Me enteré de una noticia que marco mi destino, que marco mi vida y más que eso mi alma, pero creo que debo comenzar desde el principio para que se pueda entender.
Un día como hoy conocí a una persona especial, al principio solo fue un extraño que llego de repente a mi vida de la forma más irónica posible, en una esquina mientras esperaba mi camioneta, de la nada lo vi pasar, con sus ojos color ámbar y esa sonrisa celestial que me llevaban a un mundo de sueños, muchos no creen en eso pero yo digo que lo mío hacía él fue amor a primera vista. Por casualidades del destino el paso a mi lado y de una forma extraña también se fijo en mí, mejor aún, se arriesgo a hablarme y aún recuerdo esas palabras exactas que él dijo: Había soñado contigo pero en persona eres más bella aún.
Siguió caminado pero yo decidí voltear y regalarle una sonrisa, él estaba con un amigo el cual siguió de largo, sin embargo, él me hizo señas y yo fui. Aquel día fue el mejor día de mi vida pues justamente, el día anterior yo pedía conocer a mi amor de esa forma tan irónica pero romántica y poética a la vez. Me pidió mi número y me dio el suyo, me dijo su nombre y era como melodía para mis oídos pues conjugaba perfectamente con su cara de niño lindo que me hipnotizaba y sobre todo, aquellos ojos ámbar que me mataban. Lo demás es historia.
Salimos y descubrimos que era una especie de magia rodeándonos que nos convencía cada vez más de que fuimos hechos el uno para el otro, teníamos tantas cosas en común y tantas cosas opuestas que hacían un equilibrio perfecto, atrayéndonos cada vez mas a esa trampa conocida como amor, en la cual, sin darnos cuenta, ya habíamos caído.
En poco tiempo nos hicimos novios y cada día que pasaba a su lado era mágico, solo pensaba en él y solo de recordar sus besos me sentía en un mundo totalmente diferente a este y sentía que podía volar al escuchar su voz cuando me llamaba para saber de mí.
Ya teníamos casi un año y aún era como la primera vez, aunque salíamos muy poco por culpa de sus estudios y los míos, pero, al ver sus ojos aún sentía lo mismo que el primer día que lo vi pasando por aquella parada y yo cada vez mas enamorada de él.
Decidí entregarme a él por primera vez, el primero en mi vida, sería perfecto como siempre lo había soñado, con el chico que amaba y del cual no me separaría nunca. Fue algo inexplicable, lo que sentía aquel día que él exploró todo mi cuerpo desnudo y yo pude explorar el de él, aún lo recuerdo como si fuera ayer, tan mágico, tan perfecto, tan irreal que obviamente lo repetíamos cuando se podía y aunque fueran pocas las veces por el poco tiempo que teníamos para vernos siempre era tan o mas mágico que la primera vez, pues nuestro amor crecía cada vez mas con el paso del tiempo.
Ayer, cumplimos un año y medio juntos y ha sido el peor día de mi vida, hace medio año le dijimos todo a nuestros padres que nos amábamos y habían, después de mucho luchar, aceptado nuestro amor ya era todo legal y tan lindo, tan especial que como siempre la vida tenía que terminarlo de una u otra forma. Ayer en nuestra salida para celebrar el aniversario lo note muy callado y pensativo, triste tan melancólico, hasta que me lo contó. Está sufriendo de una grave enfermedad le quedan pocos meses de vida y no hay cura alguna, inevitablemente morirá y ni yo, ni todo el amor del mundo podemos hacer nada para cambiar eso.
Hoy e decidido escribir esto, firmado con mis lagrimas, mi sangre, mi dolor y con todo ese alcohol que no e parado de tomar para ver si olvido que esta es la horrible realidad y despierto en mi cama agradeciendo que todo fue una pesadilla, la peor del mundo, pero no, aún no despierto y el dolor de las cortadas no me ayuda a calmar mi dolor interior, creo que me siento peor de lo que me sentiría si fuera yo quién va a morir.
Él, me dijo que siguiera mi vida, que me enamorara de nuevo y que no llorara porque eso lo hacia muy infeliz, pero no tiene caso, mi vida es él, mi amor, mi todo es él y nada y nadie mas, no soportaría cargar con la pena de perderlo, pero lamentablemente lo perderé.
Cuando el amor de tu vida morirá es como si muriera todos a los que mas amas y a su vez te dijeran que tu también morirás, cuando llega inesperado duele pero lo sobrellevas en cambio cuando lo avisan no sabes que hacer. ¡Vive aprovecha al máximo mientras puedes! ¡Vamos, disfrutemos los días que me quedan juntos! Así me ha dicho, siempre tan alegre, me ha medio rescatado de esta depresión siendo tan alegre, tan feliz, tan lindo conmigo como si nada fuera a suceder, me ha dicho que no me preocupe que disfrute, que lo aproveche y mañana saldremos a realizar cosas que nunca hemos realizado y aprovechar nuestros últimos días juntos como nunca lo pudimos hacer.
Esta carta la escribí hace 2 meses y hoy e retomado esta historia, ayer a sucedido aquello que mas me temía, no tengo fuerzas ni siquiera para beber o drogarme, para encontrar una salida alterna a este mundo, pienso que sería violar su memoria pues él quería que continuara con mi vida, sin mi Vida, pues mi vida la tenía él y al morir se la llevo. Algo que empezó como una historia para desahogar mi dolor, ahora se ha convertido en una carta de despedida, hice cosas increíbles y disfrute al máximo de la vida aunque fuera por tan corto tiempo que me siento en cierto modo feliz, pero a la vez no aguanto mas con este dolor tan increíble y cruel, no tengo fuerzas para continuar y no quiero terminar pidiendo en una esquina por haberme decaído hasta tal punto de terminar drogadicta por culpa de un amor perfecto que el destino y la vida decidieron arrebatarme, destruir.
¡Vive aprovecha al máximo mientras puedes! Esa es la lección que el me dejó y así lo hicimos lo aproveche pero eso no cambia esto que siento, es peor que la muerte, es el peor sufrimiento que se puede experimentar en la vida. Debimos disfrutar más, creo que espere mucho para entregarme, muchas caricias que no le di, muchos besos que faltaron, muchos lugares a donde no fuimos y solo cuando supimos de sus pocos días fue que comprendimos que cada segundo sin vernos, era un grande y valioso tiempo perdido, pero ya es demasiado tarde para arrepentimientos, desde el primer día que perdimos un segundo ya era tarde para arrepentimientos, pero espero que a los demás no les pase igual.
¡Aprovecha el amor! ¡Entrégate, vive!
¿Cuántas caricias no quisieras darle y aún no lo has hecho?
¿Cuántos besos has rechazado por falta de tiempo?
¿Cuánto has dejado de disfrutar por las clases, trabajo o cualquier trivialidad?
¿Cuánto no has dejado de sentir por tu temor a amar?
¡Ama sin miedos, ama sin dudas! ¡Ama ahora que tu amor esta allí!
¡No temas a sufrir! O no aprenderás a disfrutar.
¡No temas al dolor! O no te alegrarás al sanar.
¡No temas a morir! O no disfrutarás el vivir.
¿Qué harías si mañana él se fuera? ¿Si te enteras de que le quedan pocos días?
¿Te darías cuenta que de verdad lo amas?
¿Disfrutarías todo lo que no has disfrutado?
No se puede recuperar tanto tiempo perdido en días, semanas o meses y 2 meses jamás se compararán a un año.
Aprovecha ahora que lo tienes y así no sea el eterno amor, debes disfrutar de cada ser a quién quieres mientras puedes, mira que la vida es caprichosa y cuando sabe que no la estas aprovechando como deberías te arruina todo para que aprendas a vivir o desistas de una vez, total, mientras menos mejor. Sigue mi consejo o arrepiéntete cuando sea demasiado tarde así como lo hice yo.
El veneno ya esta haciendo efecto, y las pastillas para dormir ya me las e tomado, esta es mi despedida y creo que mi lección la aprendí algo tarde. ¿Pero sabes? A pesar de que no fue al máximo, yo lo disfrute, aunque hubiera querido aprovechar ese amor mucho más. Ya es tarde para arrepentimientos, el sueño me esta ganando, solo espero que al encontrar mi cuerpo muerto en la habitación y lean esta carta, la hagan llegar a quién sepa aprovecharla y así no comentan los mismo errores que yo cometí.
Lo siento, no pude ser tan fuerte, pero me pediste que no llorara y no lo estoy haciendo, en cambio seré feliz como te lo prometí y solo será siguiendo tus pasos hacía la muerte y encontrando de nuevo el amor que no le reprocho a la vida porque me lo quito, sino a mi porque no lo disfrute como debí, dulces sueños mi amor…
Un día como hoy conocí a una persona especial, al principio solo fue un extraño que llego de repente a mi vida de la forma más irónica posible, en una esquina mientras esperaba mi camioneta, de la nada lo vi pasar, con sus ojos color ámbar y esa sonrisa celestial que me llevaban a un mundo de sueños, muchos no creen en eso pero yo digo que lo mío hacía él fue amor a primera vista. Por casualidades del destino el paso a mi lado y de una forma extraña también se fijo en mí, mejor aún, se arriesgo a hablarme y aún recuerdo esas palabras exactas que él dijo: Había soñado contigo pero en persona eres más bella aún.
Siguió caminado pero yo decidí voltear y regalarle una sonrisa, él estaba con un amigo el cual siguió de largo, sin embargo, él me hizo señas y yo fui. Aquel día fue el mejor día de mi vida pues justamente, el día anterior yo pedía conocer a mi amor de esa forma tan irónica pero romántica y poética a la vez. Me pidió mi número y me dio el suyo, me dijo su nombre y era como melodía para mis oídos pues conjugaba perfectamente con su cara de niño lindo que me hipnotizaba y sobre todo, aquellos ojos ámbar que me mataban. Lo demás es historia.
Salimos y descubrimos que era una especie de magia rodeándonos que nos convencía cada vez más de que fuimos hechos el uno para el otro, teníamos tantas cosas en común y tantas cosas opuestas que hacían un equilibrio perfecto, atrayéndonos cada vez mas a esa trampa conocida como amor, en la cual, sin darnos cuenta, ya habíamos caído.
En poco tiempo nos hicimos novios y cada día que pasaba a su lado era mágico, solo pensaba en él y solo de recordar sus besos me sentía en un mundo totalmente diferente a este y sentía que podía volar al escuchar su voz cuando me llamaba para saber de mí.
Ya teníamos casi un año y aún era como la primera vez, aunque salíamos muy poco por culpa de sus estudios y los míos, pero, al ver sus ojos aún sentía lo mismo que el primer día que lo vi pasando por aquella parada y yo cada vez mas enamorada de él.
Decidí entregarme a él por primera vez, el primero en mi vida, sería perfecto como siempre lo había soñado, con el chico que amaba y del cual no me separaría nunca. Fue algo inexplicable, lo que sentía aquel día que él exploró todo mi cuerpo desnudo y yo pude explorar el de él, aún lo recuerdo como si fuera ayer, tan mágico, tan perfecto, tan irreal que obviamente lo repetíamos cuando se podía y aunque fueran pocas las veces por el poco tiempo que teníamos para vernos siempre era tan o mas mágico que la primera vez, pues nuestro amor crecía cada vez mas con el paso del tiempo.
Ayer, cumplimos un año y medio juntos y ha sido el peor día de mi vida, hace medio año le dijimos todo a nuestros padres que nos amábamos y habían, después de mucho luchar, aceptado nuestro amor ya era todo legal y tan lindo, tan especial que como siempre la vida tenía que terminarlo de una u otra forma. Ayer en nuestra salida para celebrar el aniversario lo note muy callado y pensativo, triste tan melancólico, hasta que me lo contó. Está sufriendo de una grave enfermedad le quedan pocos meses de vida y no hay cura alguna, inevitablemente morirá y ni yo, ni todo el amor del mundo podemos hacer nada para cambiar eso.
Hoy e decidido escribir esto, firmado con mis lagrimas, mi sangre, mi dolor y con todo ese alcohol que no e parado de tomar para ver si olvido que esta es la horrible realidad y despierto en mi cama agradeciendo que todo fue una pesadilla, la peor del mundo, pero no, aún no despierto y el dolor de las cortadas no me ayuda a calmar mi dolor interior, creo que me siento peor de lo que me sentiría si fuera yo quién va a morir.
Él, me dijo que siguiera mi vida, que me enamorara de nuevo y que no llorara porque eso lo hacia muy infeliz, pero no tiene caso, mi vida es él, mi amor, mi todo es él y nada y nadie mas, no soportaría cargar con la pena de perderlo, pero lamentablemente lo perderé.
Cuando el amor de tu vida morirá es como si muriera todos a los que mas amas y a su vez te dijeran que tu también morirás, cuando llega inesperado duele pero lo sobrellevas en cambio cuando lo avisan no sabes que hacer. ¡Vive aprovecha al máximo mientras puedes! ¡Vamos, disfrutemos los días que me quedan juntos! Así me ha dicho, siempre tan alegre, me ha medio rescatado de esta depresión siendo tan alegre, tan feliz, tan lindo conmigo como si nada fuera a suceder, me ha dicho que no me preocupe que disfrute, que lo aproveche y mañana saldremos a realizar cosas que nunca hemos realizado y aprovechar nuestros últimos días juntos como nunca lo pudimos hacer.
Esta carta la escribí hace 2 meses y hoy e retomado esta historia, ayer a sucedido aquello que mas me temía, no tengo fuerzas ni siquiera para beber o drogarme, para encontrar una salida alterna a este mundo, pienso que sería violar su memoria pues él quería que continuara con mi vida, sin mi Vida, pues mi vida la tenía él y al morir se la llevo. Algo que empezó como una historia para desahogar mi dolor, ahora se ha convertido en una carta de despedida, hice cosas increíbles y disfrute al máximo de la vida aunque fuera por tan corto tiempo que me siento en cierto modo feliz, pero a la vez no aguanto mas con este dolor tan increíble y cruel, no tengo fuerzas para continuar y no quiero terminar pidiendo en una esquina por haberme decaído hasta tal punto de terminar drogadicta por culpa de un amor perfecto que el destino y la vida decidieron arrebatarme, destruir.
¡Vive aprovecha al máximo mientras puedes! Esa es la lección que el me dejó y así lo hicimos lo aproveche pero eso no cambia esto que siento, es peor que la muerte, es el peor sufrimiento que se puede experimentar en la vida. Debimos disfrutar más, creo que espere mucho para entregarme, muchas caricias que no le di, muchos besos que faltaron, muchos lugares a donde no fuimos y solo cuando supimos de sus pocos días fue que comprendimos que cada segundo sin vernos, era un grande y valioso tiempo perdido, pero ya es demasiado tarde para arrepentimientos, desde el primer día que perdimos un segundo ya era tarde para arrepentimientos, pero espero que a los demás no les pase igual.
¡Aprovecha el amor! ¡Entrégate, vive!
¿Cuántas caricias no quisieras darle y aún no lo has hecho?
¿Cuántos besos has rechazado por falta de tiempo?
¿Cuánto has dejado de disfrutar por las clases, trabajo o cualquier trivialidad?
¿Cuánto no has dejado de sentir por tu temor a amar?
¡Ama sin miedos, ama sin dudas! ¡Ama ahora que tu amor esta allí!
¡No temas a sufrir! O no aprenderás a disfrutar.
¡No temas al dolor! O no te alegrarás al sanar.
¡No temas a morir! O no disfrutarás el vivir.
¿Qué harías si mañana él se fuera? ¿Si te enteras de que le quedan pocos días?
¿Te darías cuenta que de verdad lo amas?
¿Disfrutarías todo lo que no has disfrutado?
No se puede recuperar tanto tiempo perdido en días, semanas o meses y 2 meses jamás se compararán a un año.
Aprovecha ahora que lo tienes y así no sea el eterno amor, debes disfrutar de cada ser a quién quieres mientras puedes, mira que la vida es caprichosa y cuando sabe que no la estas aprovechando como deberías te arruina todo para que aprendas a vivir o desistas de una vez, total, mientras menos mejor. Sigue mi consejo o arrepiéntete cuando sea demasiado tarde así como lo hice yo.
El veneno ya esta haciendo efecto, y las pastillas para dormir ya me las e tomado, esta es mi despedida y creo que mi lección la aprendí algo tarde. ¿Pero sabes? A pesar de que no fue al máximo, yo lo disfrute, aunque hubiera querido aprovechar ese amor mucho más. Ya es tarde para arrepentimientos, el sueño me esta ganando, solo espero que al encontrar mi cuerpo muerto en la habitación y lean esta carta, la hagan llegar a quién sepa aprovecharla y así no comentan los mismo errores que yo cometí.
Lo siento, no pude ser tan fuerte, pero me pediste que no llorara y no lo estoy haciendo, en cambio seré feliz como te lo prometí y solo será siguiendo tus pasos hacía la muerte y encontrando de nuevo el amor que no le reprocho a la vida porque me lo quito, sino a mi porque no lo disfrute como debí, dulces sueños mi amor…
Madrid, España
11 de Octubre, 1999
11 de Octubre, 1999
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